Esta interesante historia comienza cuando Pedro
Guillen en una mañana de 1986 entrego a las manos del Museo Arqueológico de
Alicante un curioso fragmento de piedra labrada, que se halló en el interior de
la Torre Santiago, en plena huerta alicantina, a muy poca distancia de las
ruinas de Lucentum. Se trata de una gran lápida funeraria
y en cuya inscripción se puede leer:
P(UBLIUS) FVLVIVS
ASCLAS P[OM]-
PEIAN(US)
ANN(ORUM)
XXXII H(IC)
[S(ITUS) E(ST)]
AQUÍ YACE
PUBLIUS FULVIUS ASCLAS
NATURAL DE POMPEYA,
Es sabido que a lo largo de la
historia yacimientos como el Tossal de Manises, fueron profundamente espoliados
para reutilizar sus materiales de construcción sobre todo en los siglos XVI y
XVII coincidiendo en la mayor expansión de la huerta alicantina y en la construcción
de torres para protección de la misma.
La lapida de esta fantástica historia corresponde al siglo I de nuestra era y hace alusión al joven ciudadano de Lucentum Publius Fulvius Asclas natural de Pompeya ( ciudad
arrasada por el Vesubio en el año 79 d. C ) que falleció a la temprana edad de
32 años. Su importancia radica en que es la primera vez que se constata documentalmente
mediante un registro como este, que un ciudadano romano vivió en España en el
siglo I.
La lapida estaría en su origen integrada en la necropolis romana ubicada al nordeste de Lucentum.
Ruinas de Pompeya
Vista parcial de la necropolis romana de Lucentum. Fotografía del panel explicativo de Marq
Esta fantástica pieza se puede contemplar
en una de las salas del MARQ.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si no consigues enviar un comentario, puedes escribir en christianlegoff@gmail.com